El 17 de Noviembre fue la segunda cita con los cuentos del recreo. La pregunta que latía desde el primer encuentro era: ¿repetirán los alumnos?, ¿se o habrán contado a otros compañeros?
Pronto salí de dudas, pues cuando las puertas se abrieron decenas de sonrisas me recibieron. Poco a poco tomaron asiento en los escalones que nos sirven como anfiteatro, destaparon bocadillos y se dispusieron a almorzar mientras les contaba una historia.
En esta ocasión elegí dos cuentos de amor: «El reloj digital» y «El príncipe que buscaba esposa». El primero romántico hasta los huesos y el segundo lleno de dignidad.
Más de 45 chicos y chicas se reunieron esa mañana (todavía calurosa) en la que los comentarios de agradecimiento no faltaron al finalizar. Echo en falta la presencia de algún profesor.
